Mirgin Brut Nature, Cavas Alta Alella, Barcelona

MIRGIN, UN PASO MÁS EN LA EVOLUCIÓN DEL CAVA, por Luis Moreno Buj.

Cuando un enólogo cuenta con una dilatada experiencia profesional llega un momento en que puede hacer vinos simplemente por puro placer.

Josep María Pujol-Busquets ha vinificado en bodegas como Tionio, en Ribera de Duero, en la riojana Osoti, Mas Igneus en Priorat o en la vecina bodega de Parxet, entre otras. Él continúa asesorando a otras empresas, mientras elabora blancos, tintos y cavas en la finca Alta Alella, la bodega y viñedos de su propiedad ubicados entre Tiana y Alella.

Esta última población da nombre a una pequeña y antigua zona vinícola, de apenas 314 hectareas de viñedo, situada al norte de la ciudad de Barcelona, de la que dista tan sólo 15 kilómetros. Las vides se escalonan en pequeñas parcelas en las estribaciones litorales de la sierra del Maresme. Aquí la orografía otorga un papel fundamental a la personalidad de los vinos, con un terreno ondulado que da directamente al mar, protegido de los fríos vientos de tramontana y con un suelo arenoso, ácido, de naturaleza granítica, muy permeable.

Josep María condensa su sabiduría enológica en las botellas troncococónicas del Mirgin millésimé Cava Brut Nature, hecho con los vinos base de los viñedos de Alella. Este espumoso de “méthode traditionelle” es la evolución de la gama de los Privat, los Cavas que elabora a partir de uvas del Alt Penedés, como el prestigioso Privat Opus Evolution.

El Mirgin es un Cava Brut Nature de uvas Chardonnay, millésimé, que quiere decir que contiene varios vinos pero de una misma añada, con lo que se pretende reflejar la variedad climática de cada cosecha. Es un ensamblaje de vinos de elaboraciones diferentes, que combinan fermentaciones en depósitos de acero inoxidable con vinos fermentados en barricas de roble y con distintas maceraciones. El vino base de la botella catada es de la añada de 2008.

Éste es el más alto exponente de los Cavas que elabora en sus 15 hectáreas de cultivo ecológico. Tradición, respeto por el medio ambiente y modernidad se unen en un Cava de mucha personalidad.

Su color es de oro pálido, brillante, con una abundante y muy pequeña burbuja, que forma corona. La intensidad aromática es alta, para ser un Cava, elegante y complejo, con recuerdos de fruta blanca, como peras y manzanas, a frutas tropicales, con buenas notas de crianza y sutiles trazos de madera y pastelería. Al gusto es sabroso, seco y presenta un paso de boca muy suave, con cierta untuosidad, equilibrada por su agradable acidez final.

Mirgin Brut Nature: 29 euros