‘NUEVOS TXAKOLÍS’ PARA ‘PINTXOS’ SELECTOS, por Luis Moreno Buj.
Donde haya un pueblo civilizado ha de haber un viñedo. Y en Euskadi, en un clima Atlántico con influencias continentales difícil para el cultivo de la vid, la cultura popular transmitida de padres a hijos durante siglos ha hecho posible que en los caseríos se elaborasen unos vinos con nombre propio, de marcada personalidad.
El txacolí tradicional es un vino blanco muy ligero, de poca graduación, marcadamente ácido, con un ligero contenido de gas carbónico natural. Su color tiende a tonos verdosos, aunque también se elabora una pequeña cantidad de vinos tintos.
La DO Txakolí de Álava es uno de los Consejos Reguladores enológicos de más reciente creación. En el año 2002 obtuvo la certificación que avala los vinos producidos en sus escasas 55 hectáreas de viñedo. A finales del siglo XIX se llegaron a cultivar algo más de 550 hectáreas en esta pequeña zona, pero a finales del XX apenas quedaban 5, por el ataque de las sucesivas plagas de oídio, filoxera y mildiu, junto a otros factores como la industrialización y el abandono de las labores agrícolas. A principios de los años 80 del pasado siglo un grupo de bodegueros se asoció para aunar criterios de producción, incrementar la superficie de vid y conseguir un producto natural de buena calidad.
Señorío de Astobiza cultiva 10 hectáreas de viñedo orientado al sur alrededor de la bodega-caserío, en el término municipal de Okendo. Las actuales prácticas de viticultura, el cambio climático global y la tecnología empleada en la actualidad hacen que los txakolís sean más equilibrados.
El vino más popular de esta bodega es el Señorío de Astobiza, hecho con un 70% de la autóctona Hondarrabi Zuri, completado con Petit Corbu y Gros Manseng a partes iguales. Se trata de un blanco joven frutoso, fresco, con un fondo amargoso, vegetal y mineral.
El más selecto de esta bodega es el Malkoa (lágrima), un monovarietal de Hondarrabi Zuri, elaborado con mosto lágrima, sin prensado que, una vez terminado y limpio de residuos, ha tenido un trabajo de removido de sus lías finas durante cuatro meses. Las proteínas y polisacáridos que contienen las levaduras de la fermentación se diluyen en el vino, le aportan complejidad en el paladar, le dan volumen y ayudan a su estabilidad.
El Malkoa Edición Limitada de 2011 es de color amarillo pajizo, limpio y brillante. Su aroma es de buena intensidad, a fruta blanca (peras), fruta de hueso poco madura (melocotón) y cítricos (pomelo). En boca es fresco, con cierto cuerpo y ligera untuosidad que colabora en su equilibrio. Su final es largo, amargoso, con notas herbáceas y minerales.
Estos “nuevos txakolís” son para tomar en una buena copa de cristal y piden ‘pintxos’ de buen marisco cocido, ostras crudas, angulas, y queso Idiazabal “de pastor”, de leche cruda de ovejas de raza “latxa”. Si el queso es ahumado combinará bien con los matices minerales de este vino.
Malkoa 2011: 12 euros
Bº Jandiola 16, 01409, Okondo, Araba
Teléfono: 94 589 85 16
Email: comercial@senoriodeastobiza.com
Latitud 43º 9´ 15´´ N
Longitud 3º 2´18,5´´W
Denominación de Origen Txakoli de Álava – Arabako Txakolina Jatorrizko Izena
E-mail: merino@txakolidealava.com
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